sábado, 1 de enero de 2011

AÑO 2011... Y AHORA QUE?

¿Cuántos de nosotros no hemos sentido en nuestro interior, esa necesidad profunda y grande de querer cambiar o de mejorar? Pues bien, ahora que recién empieza el año 2011, es el momento propicio para atesorar y resguardar este sentimiento, no dejando que se nos escape, sino viviendo con él todos los días, eso hará que tarde o temprano se empiecen a ver realizados esos, nuestros mejores sueños. Hoy es el momento de ser otros, de ser distintos, solo tienes que atrapar y aferrarte a este deseo de cambio y tratar de hacerlo realidad.

El inicio de un nuevo año, es siempre propicio para reunir las fuerzas y toda la ilusión para comenzar el mejor año de la vida, porque todo el que se proponga convertir éste en su mejor año, lo puede lograr.

Este 2011 es una oportunidad para transformar nuestras vidas, nuestros hogares, nuestros trabajos, convertirlos en algo distinto. "Quiero algo diferente”, “voy a comenzar bien”; son frases cortas pero llenas de una carga de positivismo que hará más fácil comenzar el año bien y terminarlo mucho mejor. Quizá el año pasado no fue nuestro mejor año, es seguro que nos dejo un mal sabor de boca. Pero este se presenta distinto, esperamos que así sea; ese es nuestro mayor deseo, nuestro mejor propósito, no lo echemos a perder. Es nuestra otra oportunidad, una que no debemos desperdiciar, ya que la vida es demasiado breve.

Quién no sea capaz de decir: "Desde hoy, desde este primer día, todo será distinto", estará condenado al fracaso. En nuestros hogares arranquemos esa maleza que es el egoísmo, que tantos males provoca; vamos a estrenar un nuevo amor a nuestros compañeros, a nuestros vecinos, a nuestros amigos, seamos mejores padres o madres, mejores hijos, mejores amigos. Seamos también distintos en nuestros trabajos, en nuestra aptitud hacia la vida, compartamos día a día, y hagamos con nuestras realizaciones, las esperadas realizaciones de nuestro pueblo.

En este nuevo año, desempolvemos nuestra fe en Dios, arquitecto y artífice de nuestra existencia; elevar nuestra mirada al altísimo, llenarnos los ojos del azul del cielo, nuestros pulmones de aire puro y empezar ahora la tarea de hacer de nuestro San José de Los Llanos un pueblo desarrollado. Hártense de vivir como hemos vivido, es hora de estrenar otro estilo de vida, otra forma de ser. ¿Por qué no intentarlo ahora?, ¿Por qué no comenzar de nuevo?.

Yo me uniré a los grandes insatisfechos, a los que reniegan de la mediocridad, a los que, aún conscientes de sus debilidades, confían y luchan por una vida mejor. Todos desean a los demás y a sí mismos un buen año, pero pocos luchan por obtenerlo.

Prefiero ser de los segundos.

Nolberto Sabino

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