viernes, 29 de junio de 2012

UN TOURS IMAGINARIO

Hay lugares y cosas que me gustaría visitar y ver antes de morir. No quisiera marcharme de este mundo sin haber constatado, disfrutado o sorprendido por las bellezas y excentricidades de esos lugares. Si bien es cierto, mi país nos proporciona incontables lugares y cosas dignas de ser vistas y contadas, así mismo en todo el mundo encontraremos lugares similares, con similares cosas que ver, saber y recordar.
De lo que hablo es de un viaje por esos lugares, incrustados en los recovecos de nuestra imaginación. Ahora bien, por imaginarios e imposibles, nunca han dejado de ser para todos, paradisiacas imágenes de nuestra infancia ida.
A continuación, detallare algunos de esos lugares mágicos, llenos de misterios, aventuras y sueños, a los que me atrevería y gustaría ir, antes de firmar el último “cheque” por mis suspiros, a saber son:

·         PIEDRADURA: la ciudad prehistórica de los Pica Piedras. Tal vez ir al boliche junto con Pedro Pica piedra y Pablo Mármol, montaditos en su tronco móvil, mientras Betty y Vilma, preparan un bronco saurio a la parrilla.
·         CIUDAD GOTICA: allí encontrarme con el inigualable Batman, tal vez preguntarle de donde carajos conoció  a Robín y porque siempre anda con el para arriba y para abajo. Un paseo en el batimovil no me lo perdería por nada en el mundo y tal vez subir al techo de la oficina del Comisionado a encender el farol con el que llaman a Batman. Ah de seguro encontraría por ahí, uno de los bativillanos y me invitaran una cervecita.
·         METROPOLIS: ir de visita al periódico “El Planeta”, charlar largamente con Lisa Lane y ver si por ahí llega Superman con alguna pizzita caliente.
·         ATLANTIS: allí ver los maravillosos arrecifes y corales de la ciudad sumergidad del famoso Aquaman.
·         ETERNIA: la mágica ciudad custodiada por el poder de Grayskul. Rondar los pasadisos secretos y visitar tal vez a He-Man. Pasear con el gran Skeletor por algún restaurante o sacar a pasear a Grinller.
·         ASGARD: la ciudad de los dioses. De seguro pasaría por el palacio del Dios Thor tan solo a ver si destructor martillo.
·         CENTRAL CITY: hogar de Bird Man y su águila Vengador.
·         LILIPUT: famosa por sus pequeñas costas, sus pequeños poblados y su gente pequeña, de seguro me encontrare por ahí con Gullivert.
·         LA ISLA PARAISO: hogar de la Mujer Maravilla.
·         LA ISLA CALAVERA: donde el Fastasma combate los villanos.
·         EMPRESAS STAR: donde el increíble Tony Star (Ironman) crea trajes robóticos súper poderosos.

Podría seguir visitando y conociendo lugares y cosas increíbles e inolvidables, pero es que no tendría ni tiempo, ni dinero suficiente para costear cada visita a estos lugares.
Nolberto Sabino



miércoles, 27 de junio de 2012

MONOLOGO, DEL ESTUDIANTE FLOJO

El siguiente trabajo lo conseguimos en internet, es de un autor anonimo, por considerarlo de interes se los reproduzco. Esta dedicado en especial a todos los profesores y para aquellos estudiantes a quienes alguna vez le han llamado flojos.


MONOLOGO DEL ESTUDIANTE FLOJO 
No, no soy aplicado en la escuela. Estoy perdiendo el quinto año de primaria y soy más grande y desarrollado que los demás muchachos del curso.
A pesar de que no respondo mucho en clase, todos me aprecian porque después de clases yo les enseño a hacer muchas cosas.
No sé porqué, pero mis maestros no gustan de mí. Parece que ellos no creen que uno sepa algo si no se puede citar el libro o el cuaderno donde lo ha leído. Yo tengo muchos libros en mi cuarto: ciencia popular, enciclopedia mecánica, catálogos diccionarios, etc; pero no me pongo a leerlos muy seguido como nos mandan a hacerlo en la escuela. Uso mis libros cuando necesito averiguar algo: por ejemplo cuando mamá compra algo de segunda mano, yo busco los precios y la calidad en un catálogo comercial para que no la engañen.
En la escuela tenemos que aprender todo lo que está en el libro y yo, simplemente, no tengo buena memoria. El año pasado tuve que quedarme todas las tardes, después de clases, tratando de aprender los nombres de los presidentes. Claro está que sabía algunos como Bolívar, Santander, Mosquera; pero no me pesa mucho no haberlos aprendido porque los niños que los aprendieron tuvieron que empezar otra vez, de nuevo, y aprender los nombres de los vicepresidentes y de las juntas de gobierno. Como yo desaprobé el año, ahora estoy repitiendo el quinto curso y en este año a nuestro maestro no le interesan mucho los presidentes y nos hace aprender los nombres de los grandes inventores.
Me figuro que simple y llanamente no puedo recordar nombres en historia. De todos modos, este año estoy tratando de aprender algo sobre camiones porqué mi tío tiene tres y dice que me dejará manejar uno cuando yo tenga 16 años. Ya sé cuantos caballos de fuerza, cuantos cilindros y cuantas velocidades tiene cada uno de los diversos tipos de camiones, algunos de los cuales son Diesel. Puedo identificar esos modelos de camiones a la vista desde bastante lejos. Es curioso cómo funcionan esos motores.
El otro día empecé a contarle esas cosas a mi maestro de ciencias cuando la bomba que estábamos utilizando para hacer el vacío se calentó mucho e hizo ¡pum!; pero el maestro no veía que tenía que ver el motor Diesel con nuestro experimento, así que me quedé callado no más. A pesar de esto, mis compañeros se interesaron por lo que estuve diciendo; después de clases llevé a cuatro de ellos al garaje de mi tío y allí vimos como Gustavo, el mecánico, desarmaba un camión Diesel. ¡Ah, Gustavo: ese si sabe lo que hace!
Tampoco soy muy bueno en geografía. Este año la llaman geografía económica. Toda la semana hemos estudiado las importaciones y exportaciones de América, aunque ahora no podría decirles cuales son, porque desafortunadamente ayer falté a clases. Mi tío me llevó en un enorme camión hacia el sur a unos 100 kilómetros de esta escuela. Trajimos 10 toneladas de carga al mercado. Mi tío me dijo dónde iríamos y nada más. Yo tuve que decir los caminos y las distancias; el no hacía más que "timonear" por donde yo le indicaba. ¡Esto sí que fue un viaje divertido! Yo, sentado con un mapa sobre las rodillas le decía a mi tío: "doble a la derecha", "doble a la izquierda" ¡cuidado! y luego nos comimos unos emparedados riquísimos. Paramos 7 veces y recorrimos casi 280 kilómetros. Ahora estoy calculando el gasto del aceite y también el desgaste del camión que mi tío llama "depreciación", para saber cuánto hemos ganado exactamente en el viaje.
Yo también preparo las facturas y envío cartas a los agricultores y dueños de las granjas sobre negocios de cerdos y vacas y papa para el mercado. La última vez me equivoqué solo 3 veces en 6 cartas que escribí. Mi tía me corrige las cartas que yo escribo. Como quisiera escribir en esta forma las redacciones de la escuela. El último tema sobre el que escribimos era: "¿Qué piensan los elefantes sobre la música?" Yo no pude ni empezar cuando el maestro dijo: "¡Entreguen ya!".
¡Tampoco lo hago muy bien con la aritmética de la escuela; me parece que no puedo concentrar mi cabeza en los problemas que nos ponen. El otro día nos pusieron a resolver uno que decía: "Si un poste de telégrafo de 23 metros de altura cae a través de una carretera de tal manera que 5.5 metros de él sobresalen a un lado y 4.50 al otro, ¿Cuál es el ancho de la carretera? Me pareció un modo muy tonto de averiguar el ancho de la carretera y yo no traté de hacer operaciones porque no sabía si el poste cayó de lado o en diagonal sobre el camino.
Ni siquiera en manualidades he obtenido buenas notas. Todos los muchachos en este año hicimos mangos para escobas y soporta libros. Los trabajos míos ciertamente no eran bonitos pero me entusiasmó la idea de hacerlos. Mamá ya no usa escoba desde que compró la aspiradora eléctrica y todos nuestros libros están en estantes con puertas de vidrio en la salita. De todas formas, yo quise hacer una puerta para la carrocería del camión de mi tío, pero el profesor me dijo que para esto tenía que usar metal y este año corresponde a madera solamente. No sé por qué, pero me quedé calladito e hice un colgador de corbatas para mi papá; la puerta la hice después de clases en el garaje de mi tío: él me dijo que con ello le había ahorrado unos buenos pesos.
La educación cívica también me resulta medio difícil. He tenido que aprender de memoria algunos artículos de la constitución porque el maestro dice que no se puede ser un buen ciudadano si no se conoce la constitución. Como yo quiero ser un buen ciudadano me esforcé bastante, pero no me gustó tener que quedarme después de clases para estudiar las lecciones porqué con un grupo de muchachos estábamos limpiando un lote de terreno baldío que queda frente al taller de mecánica de González, para hacer una cancha de fútbol para los niños del barrio. Yo hice barras y paralelas y otras cosas más con tuberías usadas. Los muchachos me nombraron "jefe" del grupo. Ya hemos reunido suficiente dinero recolectando y vendiendo hierro viejo para construir una verja alrededor del terreno de la cancha. Papá dice que puedo dejar la escuela cuando cumpla 15 años y yo estoy un tanto ansioso de hacerlo porque hay muchas cosas que aprender y como dice mi tío, la escuela no me está sirviendo mucho que digamos...
Anónimo

jueves, 21 de junio de 2012

MUERTE, MANGOS Y OTROS SIN SABORES..

Ahí estaba. Sentado en su vieja poltrona de madera. Recostado a la pared de la vieja casona, dormitaba. Las largas piernas extendidas y las manos entrecruzadas al pecho, le daban un aspecto quijotesco. Se había quedado sentado allí, durante toda la mañana como si esperase paciente la llegada de la muerte.
De vez en cuando y a malas ganas se enderezaba, ponía el cuerpo en una rigidez absoluta y bostezaba, mascullaba, mordía y escupía el esputo. Después, lentamente extendía sus largas piernas y volvía a dormitar. A lo lejos, un pequeño perro, mitad hambre y mitad sarna, jugueteaba con unas gallinas.
El viejo le miraba de forma inquisidora, como si con los ojos quisiera castigarle, pero sería demasiado, bien sabia, que ese montón de huesos y pellejos no resistía un golpe. Con denodado enfado, retorcía la mirada hasta el extremo de la empalizada que daba al sendero, se quedaba atrapado entre las ramas y el verdor del monte, para luego la arrastrarla hasta las matas de mango que están en el otro extremo opuesto y las recorría con detenimiento, tanto como si contase sus frutos uno por. Y es que para el, era mejor verlos podrirse que dejar que otros los comieran.
La tarde caía velozmente y el calor hacia difícil la respiración. Ante la tranquilidad abrumadora del monte, solo el perro y las gallinas parecían vivos.
Nolberto Sabino

lunes, 4 de junio de 2012

COMO CAMBIAN LOS TIEMPOS..!

Desde los campos cercanos, los aires llenos de una dulce fragancia peculiar, entremezclados con el frio invierno agonizante, eran el claro indicio de que llegaban los anhelados días de las Fiestas Patronales en honor a “San José” Patrón Religioso de San José de Los Llanos, y era así como nuestro pueblo, vestido con un hermoso paisaje pre primaveral, exhibía feliz una sonrisa campechana.
Es en estos días, que se podían escuchar los aprestos de la Banda de Música, quienes con sus viejos instrumentos trataban de entonar los ritmos y melodías de su inacabable repertorio. Era este el aviso inminente de lo que vendría, era el inicio de las festividades esperadas por todos.

Siempre ha constituido esta temporada un escape emocional y un espacio para compartir para todos Los Llaneros. Se pone a prueba la inmensa capacidad de un pueblo para reír y disfrutar, al ritmo de sabrosa música y de su inacabable vocación de compartir, aunque sea para disculpar los malos momentos que los sinsabores de la vida prodigan a todos humanos. Las fiestas de “San José” son una convocatoria alegre para dar rienda suelta al espíritu indomable de Los Llaneros, que en la ocasión vibra y se llena de un entusiasmo colectivo que transforma la rutina diaria del pueblo en un episodio de incontables vivencias.

En la época de nuestra infancia, las tradicionales fiestas Patronales eran celebraciones donde el ingenio de los moradores se ponía a prueba cuando el Comité Organizador presentaba un programa con ambiciosas realizaciones para superar todas las celebraciones precedentes. Parecía una lucha titánica entre hombres y mujeres que dejaban flotar su imaginación para brindarle a Los Llaneros un espectáculo más digno cada vez. Era la época en que todavía las casas licoreras y cigarrilleras no habían dado el zarpazo a nuestra tradiciones populares, degenerando en fiestas plagadas de desorden y desbordamientos propagandísticos, que al final solo reducen las Fiestas, a una lucha de marcas de ron y cigarrillos.

En las fiestas de antaño, las calles principales de Los Llanos se veían engalanadas con guirnaldas y arreglos de papeles multicolores colgadas de los postes del tendido eléctrico, para servir de adorno en esas calles céntricas y así ofrecer un ambiente decorativo.

No hay que olvidar que estas fiestas patronales estaban revestidas de un hondo sentido religioso, y por esa razón respondían a un criterio parroquial influido poderosamente por los principios de la moral cristiana. En estas celebraciones todo se hacía, pero sin excesos ni escándalos, ya que si se salía de la norma, se corría el riesgo de recibir como una andanada de truenos y reprimendas, desde el púlpito dominical, en la estoica y potente voz del Padre de turno, que condenaba colérico cualquier desliz o desafuero cometido.

En los días previos a la celebración, Los Llanos vivía un ajetreo y una actividad poco normal. Las muchachas del pueblo se preparaban para concurrir a los concursos para escoger a la Reina de las fiestas de ese año. Los jóvenes en cambio, se preocupaban por lucir nuevas galas, y encargaban sus pantalones y camisas a los sastres artesanos del pueblo, que con sus prodigiosas manos, con tijera y agujas, cocían galas que hacían sentir orgullosos a sus dueños. Los mayores, por su parte, anhelaban con fuerte emoción la llegada de algún artista, de los mas pega´o a nivel nacional y en cambio, los niños ansiaban la llegada de los "caballitos," y “la silla voladora”.

Muchos noviazgos se hicieron realidad, al amparo de las fiestas patronales. La juventud vivía con nuevos bríos cada nueva edición de las fiestas, porque en ellas sentían haber andado un tramo más de las variadas vivencias del sendero de la vida, con las amplias palpitaciones de un mundo que parecía en tal temporada enormemente prometedor.

¡Cómo cambian los tiempos!

Todo el esplendor y el bullicio pueblerino que se puede acumular en las festividades de un pueblo brotaban casi de manera espontánea, en la celebración anual de las fiestas de “San José”, las fiestas patronales de San José de Los Llanos.

Los Llanos vestía sus mejores galas en esos días de grata recordación, donde muchos munícipes ponían de relieve sus cualidades ciudadanas al formar parte del Comité Organizador, que se dedicaba plenamente con un trabajo agotador a brindarle a Los Llaneros 9 días de fiesta inolvidables.

¡Cómo cambian los tiempos!


Nolberto Sabino